Siendo esta la última entrada del año en el blog, me gustaría dedicarla a hacer una valoración de 2015, que ha sido, siendo sincero, bastante intenso. Y es que, desde el mismo día 1 de enero hasta lo que resta de año, en la Federación de Diabéticos Españoles (FEDE) no pararemos de trabajar por, para y en lo que creemos: las personas con diabetes.
Me gustaría dar las gracias y felicitar, en primer lugar, a todo el equipo de FEDE, siempre dispuesto a trabajar para sacar adelante esta federación que somos todos. Por supuesto, también dar las gracias a todos y cada uno de los integrantes de la actual Junta Directiva, en la que, cambiando su gobernanza, cualquier cuestión, del calado que sea, se debate entre todos antes de tomar una decisión.
2015 se ha caracterizado por ser un año con muchas e intensas reuniones; de decenas de viajes y, sobre todo, de cientos e incluso miles de kilómetros de carretera. Pero ha merecido la pena. De hecho, si pudiera rebobinar en el tiempo, no cambiaría ni un solo ápice de lo que ha supuesto, porque, tras tanto sacrificio, he de decir que FEDE está comenzando a vislumbrar un nuevo modelo de gestión donde poco a poco tod@s comprenderán la importancia de trabajar unidos, porque, como ya sabéis, es la única forma de que nuestros problemas tengan una mejor y más rápida solución.
Es tener una idea de grupo y que todos nuestros proyectos, grandes o pequeños, tengan siempre ese punto en común de unidad, y desterrar las acciones aisladas. Necesitamos de todas las asociaciones, y no permitir que las diferencias nos dividan, porque, os recuerdo, son buenas y sanas para cualquier organización, incluida la propia FEDE.
Tenemos grandes retos para este año 2016, y quiero y necesito que entendáis de la importancia de vuestra ayuda, solidaridad y cambio de mentalidad como eje de actuación central para las futuras demandas de nuestro colectivo.

Un proyecto como este, en una organización que representa a cerca de 6 millones de españoles, os necesita a tod@s vosotr@s.